El pintor Luis Domingo Millán ha fallecido a los 69 años tras no poder vencer su lucha contra el cáncer en la que llevaba inmerso un par de años.
Nacido en Alcoy en 1947, muy joven se desplaza a vivir a Barcelona con su familia, donde llega a exponer con artistas de la talla de Picasso, Tàpies o Miró. Además de la pintura, trata el grabado, la cerámica y la escultura.
Siempre preocupado por el arte y por los modelos de comunicación publicitaria realiza numerosas iniciativas y viaja por varios países como Estados Unidos, Australia o Japón.
A la muerte de su madre, Domingo Millán abandona Barcelona y tras pasar por Valencia, Alicante y Altea vuelve a su Alcoy natal, donde residía desde 2007.
Su llegada se hace notar pues se muestra como un ‘revolucionario’, como un ‘agitador’ del arte local, realizando varias exposiciones y protagonizando originales iniciativas multidisciplinares, hasta que la enfermedad ha cortado su clásico vitalismo y fuerza expresiva.
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