Son momentos trágicos para Podemos y nos sobran razones para decir que la situación en Alcoy es más mala de lo que parece. Estamos atravesando la crisis más grande desde que nacimos y vale la pena explicar los cimientos de la falta de entendimiento en nuestro municipio.

En mis inicios en Podemos Alcoy esta lucha ya estaba desencadenada entre la mano invisible que mueve Podemos y la antigua ejecutiva a la cual se la hizo dimitir con presiones de mal gusto. Presenciar aquello empezó a menguar mi confianza, hasta que a día de hoy ha desaparecido por completo al saber de primera mano por ser miembro de la ejecutiva todos los entresijos ocultos.

Llegado este momento no quiero que se me ponga en el mismo saco de los que elaboran listas sin transparencia y sin participación de la gente del Círculo, pero que incluyen a un paracaidista que aterriza de IU dos semanas antes de las primarias. Porque allí pidió ser primero y se le dijo que no se viene aquí que manda alguien demasiado cercano a él para poder darle calabazas. Puestos de salida para dos concejales que en la actualidad son de Guanyar, fuerza hermana con quien no llegan a acuerdos para ir juntos en las próximas elecciones, por la negociación de los puestos en la lista. ¿Asegurar su continuidad en el Ayuntamiento a cualquier precio podría ser su objetivo? Y por si acaso en la lista todos los familiares, madres, padres, hijos y sobrinos, que apoyan la maniobra tejida en la oscuridad, por una especialista en estas artes, la mano invisible.

Y mientras, asisto al suicidio de Podemos en Alcoy. Aquel proyecto que tanto nos ilusionó y que con buena fe y dando gala de honradez intentamos crear, no me queda otra opción que desmarcarme de esa forma de hacer política presentando una mini lista, por eso de ya estar dentro del proceso y porque creo que es responsabilidad de cada uno de nosotros que siga en el tablero político la gente capaz, tanto ética como profesionalmente hablando. Aunque muy a mi pesar, las cartas ya están boca arriba y se ve con claridad quien será el vencedor. Ojalá me equivoque.