Medio Ambiente talará aproximadamente 200 chopos en la zona del Molí Payá, justo al lado del Albergue Canino Municipal. El motivo es la seguridad y es que muchos de estos árboles al ser tan viejos se estaban cayendo ellos mismos o algunas de sus ramas. La caída de estos árboles enteros de grandes dimensiones ha provocado desperfectos en las dependencias del albergue.

Se trata de un tipo de chopo introducido pues su madera era aprovechada, algo que ahora ya no se produce, por lo que han proliferado y desplazado a las especies autóctonas. Estos árboles comienzan a ser también una amenaza para vehículos y peatones que transiten por la carretera Alcoy-Banyeres o por el sendero local.

Según Tormo, “se talarán aquellos árboles que estén más deteriorados y su madera quedará para su aprovechamiento como biocombustible para calderas y estufas de biomasa. Los plataneros que también abundan en la zona pese a ser otra especie invasora, se dejarán pues no presentan peligro de caída”.

Por último, a medio término se realizará un proyecto de restauración paisajística que habrá de ser aprobado por la Confederación Hidrográfica del Júcar y por la Conselleria de Territorio y Medio Ambiente.

La tala se llevará a cabo los días 22 y 23 de abril y provocará cortes de tráfico intermitentes en la carretera de Banyeres desde las 8 horas.