La decisión de cerrar al tráfico Sant Llorenç durante las tardes los fines de semana ha vuelto a ser motivo de reacción por parte de algunos vecinos y comerciantes, como ya ocurrió el pasado año..

Hay quejas por los horarios escogidos y porque, según indican, no se ha consensuado con todos los sectores económicos, por lo que la medida podría beneficiar más a un tipo de establecimiento que a otros, que a esas horas no tienen actividad.

La concejala de Compromís, Anna Serrano ha asegurado que ha habido falta de diálogo y consenso con los sectores más afectados, porque “no se puede anunciar a bombo y platillo que se cortará el tráfico sin haberlo hablado con los implicados”. Para Serrano, si se hubiera ampliado el horario se beneficiaría también a los comerciantes.

Además, Anna Serrano ha afirmado que la decisión tomada ahora “es una muestra más de la improvisación del gobierno porque hace un año se hizo la remodelación de la calle Sant Llorenç, que costó 24.000 euros, sin saber si se quería peatonalizar o qué”.

 Por último, la regidora ha recordado que actualmente el Ayuntamiento no concede nuevas licencias para la instalación de mesas en la calle. Anna Serrano recuerda que esta cuestión se trató en el Pleno de marzo y que el concejal aseguró que no había problema, pese a que el Gobierno se disponía a modificar la ordenanza que afecta a las terrazas de los bares.