Esta semana los medios de comunicación han publicado dos noticias que uno de los ejemplos más claros de una mala interpretación teatral.

La primera noticia hablaba de la creación de una nueva plataforma ciudadana basada en la filosofía de Podemos. Una iniciativa que parte de planteamientos participativos, con promesas de una nueva gestión, obviamente estoy hablando de Guanyem. Dicha plataforma, según lo visto en medios, se mira en el espejo de Guanyem Barcelona; un movimiento ciudadano que puede resultar interesante.

A pesar de que no creo mucho en estas formaciones que defienden un posicionamiento de izquierdas, del que se beneficia a la derecha; me pareció que era normal su aparición en la escena política actual. Estos movimientos recogen el voto cansado de la política, que es mucho. Es un grupo surgido por el cabreo razonable de los ciudadanos y la falta de soluciones rápidas para una crisis que ha hundido a muchas familias en un pozo de diferencias, pobreza e indignidad.

A pesar de esa simpatía inicial que me generó este movimiento, cuando accedí a los medios de comunicación gráficos se desveló todo el primer acto de esta actuación teatral con la que no se si pretendían engañar al espectador, o sea, al ciudadano. No había mucho más que decir, se había descubierto el final: un exconcejal de Izquierda Unida, un militante activo de Izquierda Unida, un presidente de Asociación de Vecinos vinculado también a Izquierda Unida y familiares de militantes de Izquierda Unida. En resumen: Izquierda Unida.

Me surgieron dudas por si yo era un poco mal pensado y estas personas habían dado este paso libremente, por desavenencias con los partidos de la llamada casta entre los que se encuentra Izquierda Unida. Entonces llegué a la siguiente noticia, el segundo acto de esta pieza teatral en varios actos.

“Izquierda Unida se interesa por Guanyem”. Correjeta descoberta. Ya estaba claro. En resumen, como la marca Izquierda Unida está identificada como ‘casta’; en los sondeos Podemos recoge el voto del cabreo y no lo hace IU como podrían esperar. Pero no hay problema, creamos una marca blanca, basada en el populismo, cambiamos el nombre para que se identifique como Podemos y damos gato por liebre.

Falta algún acto más. La confesión por parte de Izquierda Unida de que ese movimiento es un ejemplo para ellos y se integran en el mismo, la alabanza a la participación ciudadana y al movimiento social para hacer uso de ellos, y alguna otra que posible renuncia a presentar lista Izquierda Unida en Alcoi para permitir que este movimiento ciudadano tan neutral, tan basado en gente no vinculada a la política –únicamente militantes y ex concejales de Izquierda Unida- se presente y obtenga el voto que no tendrá Podemos.

Porque en Podemos han sido muy listos. No se presentan a las elecciones locales para evitar el desgaste de la gestión de las administraciones. En el caso de Guanyem se les ve el plumero a algunos. Espero que los propios simpatizantes de este movimiento no permitan que les fagocite Izquierda Unida, un partido de esa ‘casta’ contra que la que todos, se supone, luchan.