El equipo infantil de fútbol sala del colegio José Arnauda es todo un ejemplo de integración. Está formado por los porteros Ángel Valor y Rubén, los defensas Fran, Juan, Edgar y Gorka y los delanteros Jorge, Pau, Adrián, Jordi y Javi Cordero.

Sería un equipo más de cuantos forman los Jocs Esportius de la Comunidad Valenciana representando a un colegio de nuestra ciudad, si no es porque tanto Ángel como Javi son especiales. Javi tiene síndrome Down y Ángel, asperger.

El entrenador de todos ellos es Dani Carbonell y él explica que “el papel de Ángel y Javi es muy importante para el equipo. Incluso recuerdo que jugando contra Horta Major, perdíamos 0-2, nos pusimos 3-2, nos empataron y Javi fue quien marcó el gol del triunfo en el último minuto. El resto de jugadores lo mantearon. También marcó en las 13 Horas del colegio. Ángel también es buen portero. Le digo que actúe con cabeza y lo hace. Me dice que le gustaría jugar de delantero pero ya son muchos arriba y necesitamos otro portero. Se sienten apoyados y ayudados y ellos también nos ayudan a nosotros”.

Fruto de ello es que han quedado cuartos en la clasificación final aunque con dos partidos menos jugados, que de haberlos ganado les hubiera situado como segundos. Todos los chavales tienen entre 12 y 13 años y demuestran que la diferencia no es ningún obstáculo ni problema. Gracias al fútbol, Ángel y Javi forman parte de un grupo unido y se divierten como el resto de sus compañeros al tiempo que hacen deporte.