El alcalde, Antonio Francés, ha admitido en la Comisión de Sostenibilidad que la cesión de la Llotja Sant Jordi para la comida del capitán moro del Día de Sant Jordi se hizo sin seguir los procedimientos necesarios.

Tal y como ha explicado el concejal del Partido Popular Edu Tormo “el alcalde contestó con monosílabos, cabizbajo y mareando la perdiz”. Según Tormo, Francés ha confirmado que no se ha iniciado expediente alguno para la cesión, que no existe decreto de Alcaldía en el que se señalen las condiciones de uso del local, que no se contrató ningún seguro de responsabilidad y que no ha existido plan de seguridad o emergencias.

Sobre el coste para la Filà Miqueros, Francés ha respondido a las preguntas del PP que el local se cedió a su filà sin aplicar tasa alguna, a modo de cesión, ya que la Llotja no está incluida en la Ordenanza Fiscal que regula el precio de alquiler de los espacios públicos.

Por último, el alcalde ha asegurado que hay una solicitud escrita de la Filà Miqueros, de la que el PP ha solicitado copia. Según Francés, la intención de su Gobierno es continuar cediendo la sala, pese a que no tiene licencia de apertura. Al parecer, la Filà Magenta la ha solicitado.

Para Edu Tormo, la excusa que pone Francés de que la sala se ha utilizado anteriormente para otros actos públicos no es válida, ya que “su uso como salón de banquetes genera competencia desleal con otros establecimientos que tributan todo el año y cumplen a rajatabla las normativas de seguridad establecidas”.