Si los sabores son lo importante en unas jornadas gastronómicas, en el caso de estas Jornadas ‘A la Brasa’ del Restaurante la Vi·leta del Hotel Vila de Muro hay que sumar las sensaciones que se suman al estar en un marco especial.

Empecemos por la comida, o por la cena, porque estas jornadas tienen programa doble. Un jamón ibérico al corte acompañado de unas almendras al punto nos dan la bienvenida. De noche, la terraza nos da el ambiente ideal para una degustación avanzada de carnes, pescados y verduras a la plancha.

Anochece en Mariola frente al Restaurant La Vil·leta y poco a poco va despareciendo la silueta de la Penya del Frare, icono natural de Muro. Es la hora del queso, de la provoleta con confitura de tomate y vainilla, con sabor a brasa, a vida.

Después, la pareja pescado-carne. Abre el capítulo el pulpo frito a la brasa con all i oli de pimientos del piquillo, crujiente y tierno a la vez, que precede a la brocheta de solomillo y xalota al Oporto a la brasa con salsa de Pedro Ximénez. Después, en el centro, entrecotte al brasa tinchado.

Ya en la recta final del menú de este jueves, primer día de las Jornadas ‘A la brasa’, un granizado de limón a la parrilla que ayuda a digerir cada sabor y de postre, una copa de piña colada con espuma de leche merengada y tierra de coco, que el responsable de la cocina de La Vil·leta, Ever Sevilla prepara justo un segundo antes de su degustación.

Este viernes y sábado, más Jornadas, con dos menús más en los que llegan los platos de brasa con moluscos, más quesos, carnes y pescados.