Alcoy tendrá desfibriladores en espacios públicos, si se cumple la propuesta de Guanyar Alcoi aprobada en el último pleno.

En concreto, la iniciativa que defendió la portavoz de la formación de unidad popular, Estefanía Blanes, supone dedicar una partida presupuestaria a la compra e instalación de desfibriladores externos semiautomáticos. Además, se va a promover una campaña informativa para concienciar sobre la importancia de disponer de espacios cardioprotegidos.

“Según los expertos, la desfibrilación rápida para la recuperación del ritmo cardíaco es la única forma de conseguir una mayor supervivencia en un tratamiento adecuado y precoz de las víctimas mediante una correcta reanimación cardiopulmonar”, ha explicado Blanes.

LOS DESFBRILADORES

El desfibrilador externo semiautomático es un aparato electrónico portátil que diagnostica y trata la parada cardiorrespiratoria cuando es debida a la fibrilación ventricular (el corazón tiene actividad eléctrica pero sin efectividad mecánica) o a una taquicardia ventricular sin pulso (hay actividad eléctrica y en este caso el bombeo es ineficaz), restableciendo un ritmo cardíaco efectivo eléctrica y mecánicamente.

La desfibrilación consiste en emitir un impulso de corriente continua al corazón, despolarizando simultáneamente todas las células miocárdicas, pudiendo retomar su ritmo eléctrico normal u otro eficaz. La fibrilación ventricular es la causa más frecuente de muerte súbita.

En España se estima que cada año se producen más de 30.000 paradas cardíacas, lo que equivale a una media de una parada cardiaca cada 20 minutos, ocasionando 4 veces más muertes que los accidentes de tráfico.
La experiencia acumulada en estas décadas en las Unidades de Cuidados Intensivos demuestra que la efectividad de la desfibrilación temprana en la recuperación de un ritmo cardíaco eficaz es del 90% cuando es posible efectuar la desfibrilación. Esta efectividad disminuye muy rápidamente, concretamente por cada minuto de retraso en desfibrilación se reduce la supervivencia en un 7-10%, por lo que después de 10 minutos las posibilidades de sobrevivir son mínimas.

En España se estima que hay 10.000 unidades, en Francia hay 100.000, en Alemania 80.000 y en el Reino Unido 50.000.