Seguro que muchos padres se cuestionan muy seriamente qué tipo de educación quieren para sus hijos. Elegir aquel centro que es más acorde con sus principios, y a la vez garantice un buen nivel académico para afrontar satisfactoriamente la demanda social es una de las claves que asegurará el desarrollo integral de nuestros seres más queridos.

Dejar a los niños en buenas manos es fundamental desde que nos vemos en la necesidad de compartir la compleja tarea de formar a nuestros pequeños. Elegir el centro adecuado desde la etapa de Educación Infantil, es transcendental para poder asegurar la continuidad de una misma línea pedagógica. Centrar la atención únicamente en los cursos iniciales de la etapa, sin valorar en su conjunto todo el proyecto que un colegio puede ofrecer hasta el final de la oferta educativa, puede ser un error que después es difícil de enmendar. Básicamente, porque cuanto más se avanza en el proceso, mayores son los miedos que nos invaden, y por otro lado, más dificultades encontramos para asegurar una plaza o para realizar el trámite.

La educación de los hijos es un pilar básico en su desarrollo durante la etapa escolar. Elegir un colegio adecuado, no solo por los conocimientos que pueda adquirir, sino por los valores que se le transmitan o las habilidades que desarrollen, son los cimientos que en el futuro sustentaran los retos que presenta la vida. Es por ello que desde los primeros pasos en el mundo académico es importantísimo que estén en buenas manos, y elegir el centro ha de ser una prioridad a partir de los 3 años. 

Tomar este tipo de decisiones es una responsabilidad que lleva a los padres a tener que valorar qué proyectos educativos son los más afines a sus intereses. Pero para ello, también deben tener conocimientos de las demandas actuales y de futuro que tiene la sociedad. Esta es una ardua tarea, pues el mundo cambia a una velocidad de vértigo, y los colegios llevan ritmos muy distintos. Aquellos que mejor se adaptan a las necesidades imperantes, y sobre todo aquellos que tienen un plan estratégico definido de una forma visionaria, para intentar adelantarse a lo que el entorno exigirá, son los centros que podrán garantizar un mejor desarrollo de sus alumnos.

Cada colegio tiene su propio proyecto educativo, pero el acento debe ponerse en una serie de aspectos relevantes: la importancia que se le da a las tecnologías, las etapas educativas que oferta, las metodologías que llevan a cabo, el proceso de evaluación de los aprendizajes adquiridos, los servicios de tutoría y medidas de atención a las necesidades educativas, los programas de lectura y expresión oral, la convivencia y la educación en valores, el tratamiento de la actividad física y el deporte, las instalaciones y servicios, los idiomas, la creación de proyectos y recursos propios, la atención a los alumnos y familias, los sistemas de calidad implantados, su identidad y misión...

Encontrar un centro que pueda asegurar el cumplimiento de la mayoría de estos puntos, es una tarea complicada, que requerirá tiempo y cierta experiencia o asesoramiento. 

Sant Roc, una apuesta segura

El colegio Sant Roc de Alcoy cumple todos estos requisitos y cuenta con el aval de más de 100 años de historia al servicio de la educación. Situado en una de las arterias principales de la ciudad, se encuentra el que es hoy en día uno de los buques insignia de los colegios diocesanos de Valencia. Es un centro pionero para esta fundación, a la vanguardia en las metodologías más innovadoras que el panorama educativo actual ofrece y donde el niño se encuentra en el centro del proceso de enseñanza-aprendizaje. 

El equipo humano que forma parte de su comunidad trabaja con especial mimo la importancia del niño como individuo y como parte de un grupo. Es por ello, que su plan de acción tutorial se basa en la mejora de la convivencia, en el aprendizaje cooperativo, la tutoría individual y grupal, para erradicar cualquier tipo de violencia y rechazo. Prueba de ello, son las innumerables iniciativas para atajar el acoso escolar, los proyectos europeos que se desarrollan o el plan de formación y acompañamiento a las familias.

Además, Sant Roc es el único centro que cuenta con todas las etapas educativas: infantil, primaria, secundaria, bachiller y ciclos, la oferta más plural que un centro educativo pueda ofrecer. 

El claustro es sin duda uno de sus valores más importantes. Profesores en continua formación. Inmersos en proyectos intercentros y redes de comunicación pedagógica. Partícipes en proyectos europeos de intercambio, con movilidades a otros centros internacionales o coordinando proyectos K2 de mayor transcendencia. Destaca también su papel de tutorización y acompañamiento más individual al niño y también a las familias, a través de la escuela de padres y la plataforma de comunicación on-line.