Este lunes ha comenzado la intervención para procurar un mejor drenaje al puente de Sant Jordi, tras su inundación con las lluvias del pasado sábado 16 de septiembre.

La falta de drenaje adecuado propició que pocos días después de su reapertura buena parte de la plataforma quedara anegada, una imagen que mostró defectos de ejecución en la obra, todavía sin acabar.

Ese mismo lunes por la mañana técnicos del Ayuntamiento revisaron el sistema de alcantarillado. Tras su inspección, se determinó realizar un test que consistió en descubrir las tapas de los desagües y echar agua desde una cuba. El resultado de la prueba recomendó que se abrieran más puntos de drenaje.

Esta obra coincide con la del reasfaltado de la calle Sant Tomàs.