La leishmaniosis es una enfermedad parasitaria que afecta a los sistemas y órganos vitales de los perros y por ello debemos estar muy atentos para que nuestras mascotas no se vean en peligro como explica María José Blanquer de Clínica Veterinaria VeterSalud Hospital 24 Horas.

El parásito es transmitido por la picadura de un mosquito que previamente ha picado a un animal infectado y no tratado. Esta enfermedad está presente en prácticamente la totalidad de la península ibérica.

El periodo de incubación de la enfermedad va de los 3 meses a los 2 a 3 años y si bien afecta principalmente a los perros, en raras ocasiones puede afectar al ser humano, si éste se encuentra inmunodeprimido, es decir, personas trasplantadas o con largos tratamientos con corticoides.

Es importante destacar que el perro no puede contagiar directamente a nadie por muy en contacto que esté con la persona. Este contagio solo se da por la picadura del mosquito que lleva por nombre el mosquito 'Phlebotomus'.

Los síntomas que deben alertarte sobre la posibilidad de que tu mascota pueda padecer esta enfermedad y por los que debes acudir de inmediato al veterinario son: pérdida de peso del animal, problemas en la piel, cojeras, sangrado nasal, problemas oculares, aumento del tamaño de los ganglios o problemas gastrointestinales.

El diagnóstico es rápido y sencillo por medio de un análisis de sangre y la detección precoz es la clave para el éxito del tratamiento por lo que María José Blanquer de la Clínica Veterinaria VeterSalud Hospital 24 Horas recomienda realizar al animal un chequeo anual rutinario con ese análisis de sangre al final de los meses más calurosos, como son octubre o noviembre, justo en el momento en el que nos encontramos. Se trata de la  mejor práctica para detectar y en caso positivo tratar la enfermedad a tiempo y que así el resultado del tratamiento sea positivo.