Al ser un día de Julio he tenido ocasión de poder seguir en su totalidad la segunda sesión de investidura del candidato Pedro Sánchez del PSOE en su totalidad, o mejor dicho, casi en su totalidad puesto que a la hora de la votación ya he desconectado el televisor pues carecía de sentido seguir pues el resultado estaba cantado. El espectáculo ha sido de un bochorno absoluto. Aquello era un mercadillo en la que se cambian los votos por pactos y los acuerdos por favores.

El discurso de Sánchez al que incluso han llegado a tildar de marioneta ha sido el que mas me ha llamado la atención pues en el fondo no era mas que un mitin que me ha molestado muchísimo pues este señor utiliza la tribuna de oradores para cosechar votos ya que así lo hizo en su moción de censura que sorpresivamente le valió una corta presidencia de gobierno repleta de despropósitos y ahora lo ha vuelto a hacer pero con mas soltura pues ya se ha puesto a plantarse ante las cámaras  utilizando el congreso de los diputados para hacer campaña.

En los debates de televisión salió perdedor en todos y por eso utilizando la supremacía que le da el hablar el solito sin reproches y si los hay los contesta ampliando su campaña me ha parecido de un descaro sin precedentes. Solo tenía 10 minutos para hablar y el resto de partidos 5 minutos y Sánchez ha consumido cerca de 25 minutos sin que nadie le llamara la atención aunque la presidencia de la cámara si que les recordaba el tiempo al resto de los parlamentarios y ya solo con este detalle nos da un esbozo del perfil de Sánchez que no es otro que el de un narcisismo exacerbado.

La pugna entre PSOE y PODEMOS ha sido escandalosa pues incluso se ha ofrecido por el líder de PODEMOS en última instancia la exclusividad de las políticas de empleo activas dando al momento mayor descaro si cabe. Después han ido pasando los nacionalistas y los separatistas con sus ya consabidas pretensiones de mi voto a cambio de y en cuanto a los discursos de los partidos de derechas pues poco que reprochar pues desde mi criterio e insisto en ello “desde mi criterio” son los que han mantenido en esta ocasión una coherencia con lo que exponen y con lo que les piden sus votantes.

La investidura ha sido una jugada mas de Sánchez maquiavélica en su encendida carrera por alcanzar la presidencia del gobierno, algo que se le resiste desde siempre y que después de lo visto debería abandonar la idea pues España no se merece un Presidente que para alcanzar el poder es capaz de pactar lo que jamás se debe pactar y dejar por último bien patente que la investidura no ha sido una derrota de la izquierda sino un triunfo de la derecha y eso es lo que mas debe doler a los votantes de izquierdas que ven truncadas sus ilusiones por causa de un personaje que no merece el puesto al que aspira.

Y por último dejar bien claro que los votantes depositamos nuestra papeleta para que se haga posible nuestro ideal pero visto lo visto, una vez tienen los políticos nuestros votos se hacen el traje a la medida que a ellos mas les conviene y esto ya huele mucho a podrido. Voy a continuar con mis quehaceres profesionales después de estas líneas, pues como siempre digo es  mi labor profesional la que me hace ser feliz al poder desde mi despacho materializar la justicia social a la que tanto amo y debo y lo haré mientras alguien me lo pida y la vida me lo permita.