Víctor Parada ha sido liberado tras años de cárcel en Malasia y una condena que lo hubiera llevado a la pena de muerte. El boliviano con familia en Alcoy y vecino de Benilloba durante varios años ya vuela camino a su país natal después de una pesadilla que empezó en 2013 con su detención en el país asiático.

El joven fue encarcelado por transportar dentro de su cuerpo alrededor de medio kilo de cocaína. Los problemas económicos en su familia obligaron a Parada a hacer de mula para poder pagar deudas pendientes. Ahora, tras varios juicios y el testimonio de su madre para alegar los problemas que le llevaron a tomar esta decisión, las autoridades de Malasia lo han liberado.

En este desenlace ha jugado un papel muy importante el gobierno del país boliviano. Al conocer el caso, y tras la intervención de los ayuntamientos de Alcoy y Benilloba y también del Congreso y el Senado españoles, las negociaciones institucionales han podido llegar a buen puerto. La abolición de la pena de muerte a partir de 2018 en el estado asiático y el juicio del pasado 24 de julio han desembocado en la libertad de Víctor Parada después de 6 largos años de desesperación.