La decisión de acortar la Cabalgata al final de País Valencià es, sin duda, el tema polémico de conversación más recurrente desde que este jueves se anunció en rueda de prensa conjunta de Ayuntamiento y entidades participantes en el desfile. A la protesta inicial de los vecinos del Ensanche, se han unido otros colectivos e incluso hay una plataforma de recogida de firmas abierta en contra del nuevo itinerario.

Compromís Alcoi ha expresado su opinión a través de la voz del militante de la formación nacionalista Benjamin Buckman. En un artículo de opinión, entre otros aspectos, cuestiona la seguridad del nuevo recorrido por la aglomeración de personas que se puede producir en la parte que se mantiene, además de proponer que el tramo de Cervantes se habilite para personas con problemas de movilidad.

Guanyar Alcoi se centra en la gestión del cambio por parte del Gobierno Municipal. La portavoz de la plataforma de unidad popular, Sandra Obiol, ha afirmado que “el PSOE gobierna a golpes” y pide reflexión y participación de todos los agentes implicados, incluidas las entidades que conforman el desfile y asociaciones de vecinos. Para Obiol, “puede ser un cambio razonable que debe valorarse”, pero critica que no se haya comenzado a hablar más pronto. “Hacer las cosas bien hubiera significado comenzar en febrero a hablar del tema, pero han decidido hacer las cosas deprisa y mal, como si no supieran que el 4 y 5 de enero de cada año tienen un compromiso adquirido con el pueblo de Alcoy”, ha declarado Sandra Obiol, quien ha añadido que “el cambio podría perjudicar a las familias que padecen situaciones laborales precarias, a trabajadores con horarios que no permiten acabar su jornada laboral a tiempo. Al tiempo, ha criticado que no se haya facilitado el informe de Protección Civil sobre el incremento de afluencia, toda vez que la Cabalgata se anuncia como atracción turística.