El Partido Popular ha propuesto revisar las tarifas del agua para ajustar los precios a la actual situación del contrato, que fue prorrogado en junio por un año más con el único voto favorable del PSOE.

El portavoz municipal del PP, Quique Ruiz, ha indicado que, “con el contrato finalizado, la empresa Aqualia tiene que dejar de contabilizar como gasto, al menos, la amortización de inversiones, que en 2019 fue de 42.843 euros, ya que estos gastos fueron amortizados durante el periodo de vigencia del contrato”. “Los precios que pagan los vecinos deben ser justos. Si como consecuencia de la prórroga, desaparecen gastos, desde ese momento deben reflejarse en los recibos”, ha recalcado el edil.

Además, los populares exigen al PSOE que elabore un calendario de actuaciones para definir el modelo de gestión del servicio público de agua. “El Gobierno consintió que caducase el contrato sin tener claro si iba sacar a concurso un nuevo contrato o si iba a municipalizar el servicio”, ha señalado el concejal.