
Después de la época de navidad, mucha gente opta por empezar una dieta. El turrón y los polvorones han sido nuestra sobremesa durante más de un mes y ahora toca empezar a cuidarse. Como se ha dicho siempre, año nuevo, vida nueva. Es por eso que las dietas están a la orden del día.
Nosotros este año nos hemos propuesto introducir un postre distinto en nuestras dietas. Ojo, sin pasarse eh, pero algún que otro caprichito sí que nos vamos a dar.
¿Cómo? Muy fácil, con la tarta de requesón de Pastamanía. El requesón es un derivado lácteo que no solo está riquísimo sino que además nos ayuda a adelgazar y nos aporta nutrientes y vitaminas. Su elaboración es el resultado de procesar por segunda ocasión el suero que sobra de fabricar queso y cocerlo a una temperatura de 90 grados con bacterias lácticas que dan como resultado un producto balanceado y sano.
Al ser un producto lácteo que no necesita maduración, como algunos quesos, el porcentaje de agua que contiene es alto y el aporte de grasas que posee es bajo (4 gramos por cada 100 de alimento). Además, el aporte de vitaminas que ofrece es importante ya que es rico en calcio, potasio, fósforo, vitamina A y complejo B que ayudan a fortalecer los huesos, reducir el riesgo de desarrollar cálculos renales y disminuir las concentraciones de azúcar en la sangre.
Por otro lado, las vitaminas que se encuentran en el requesón como la vitamina B12, la riboflavina y el ácido pantoténico ayudan al buen funcionamiento del cerebro y a convertir los carbohidratos en energía. El requesón es una buena fuente de magnesio que activa las enzimas del cuerpo, mantiene el funcionamiento de los músculos y los nervios, previene ataques cardíacos, estreñimiento y trastornos psiquiátricos y migraña.
Por si fuera poco, un estudio realizado en 2012 demostró que el consumo moderado de requesón junto con otras frutas y verduras es efectivo para lograr y mantener la pérdida de peso. Con esta información tenemos más que suficiente para convencernos para probar los postres de Pastamanía y es que allí preparan dos tartas de requesón que están de rechupete, una con arándanos y otra con fresa.
Sí, lo sabemos, no hay que abusar, pero oye, que solo se vive una vez y nosotros lo tenemos claro, no vamos a vivir con la espinita clavada de no haber probado estas dos deliciosas tartas.
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