Los últimos años nos han mostrado que ya no hay certezas absolutas y que las realidades están en continuo cambio. Por un lado, las nuevas generaciones ya no compran vivienda y viven de alquiler, por otro, los cambios en las alternativas de inversión tradicionales, y por último, el nuevo escenario de inflación, ponen en valor la inversión en vivienda para alquiler como un Plan de jubilación alternativo que ofrece altas rentabilidades.

La inflación ha vuelto nuestra economía. Esto implica que si dejamos nuestros ahorros en la cuenta corriente, con el paso de los años, nuestro dinero perderá poder adquisitivo y tendrá un menor valor. Pues ya sabemos que los bancos, lejos de retribuir el ahorro, lo penalizan con gastos y comisiones.

En este nuevo escenario no deberíamos dejar nuestro dinero improductivo. Por lo que es importante conocer las diferentes alternativas de inversión que se nos presentan.

La inversión en renta fija (deuda pública) no es buen negocio por su escasa rentabilidad y la inversión a largo plazo en fondos de renta variable (acciones) o en bolsa, aunque algo intangible, puede ser una buena alternativa, pero reservada a valientes con corazones fuertes.

Son tiempos de debate, tanto del futuro de nuestro sistema de pensiones como de la fiscalidad de los planes de pensiones privados.

Por todo ello y por la alta demanda y la escasa oferta de vivienda en alquiler, la inversión en vivienda puede ser el mejor plan de jubilación a largo plazo.

La vivienda es un bien tangible, que ofrece rentabilidades que oscilan entre el 5% y el 10% y que en los últimos años ha vuelto a la senda de la revalorización anual por el incremento de los precios.

Además, está al alcance del pequeño ahorrador, pues con cantidades relativamente bajas, a partir de 40.000€, ya puedes encontrar producto atractivo y rentable.

Si quieres ayuda para planificar tu futuro, el equipo de Picó Blanes Inmobiliaria sabe cómo rentabilizar esos ahorros.