Los espárragos trigueros son nativos de la zona del mar Mediterráneo, cerca de los ríos Tigris y Éufrates. En los antiguos Egipto y Grecia se usaban como alimento y como ofrenda para los dioses. Fueron los romanos quienes popularizaron esta planta debido a sus propiedades medicinales y la llevaron por toda Europa.

Este alimento se trata del tallo principal de una planta llamada Aspargus Officinalis que puede medir hasta un metro y medio de alto. Pertenece a la familia de los puerros, cebollas y cebollines aunque no se parezcan en cuanto a forma y sabor.

Según la Fundación Española de la Nutrición, los espárragos cuentan con muchas vitaminas. Este brote usado desde la antigüedad se recomienda por sus diferentes beneficios ya que es diurético, al estar compuesto en su mayor parte por agua, facilita la eliminación de líquidos, es laxante debido a la fibra presente en su composición, es antioxidante, favorece la función cognitiva ya que tiene una buena dosis de ácido fólico y es recomendado para los huesos, gracias a la vitamina K que aporta este producto.

Por otro lado, es un alimento con bajo contenido en calorías, contiene una gran cantidad de vitaminas sobre todo B1, B2, B6, A, C y E. Además, los espárragos trigueros se pueden preparar de muchas maneras, a la plancha, hervidos, al vapor, a la brasa o como guarnición de otros platos. Es por eso que Pastamanía ha decidido incluir una pizza con este producto en su carta, en concreto hablamos de la 4 Estaciones.