La infancia es una etapa fundamental para el cuidado de la boca y las piezas dentales. Para ello son necesarias las revisiones dentales cada cierto periodo de tiempo para tener un seguimiento del crecimiento bucal y comprobar que evoluciona correctamente. Los expertos afirman que protegiendo la salud bucodental en la niñez se consiguen beneficios como masticar mejor con dientes sanos y vocalizar correctamente.

Se recomienda llevar a los niños al dentista al menos una vez al año para revisiones dentales. En caso de necesitar más atención específica o tratamiento por alguna dolencia o algún tipo de afección, la frecuencia será más regular. También, conviene que los padres examinen de forma habitual la boca de sus hijos ya sean niños o bebés para ser conscientes de su estado bucodental y acudir a consulta si fuera necesario.

Los expertos de Clínica Barrachina advierten que para el pequeño puede no ser una visita fácil, por eso es recomendable hacerla divertida, sobre todo la primera vez. Con una consulta más amena no les resultará tan pesada y puede que no les importe volver para la siguiente revisión. Además, según expertos es mejor si la primera visita es una revisión para así evitar una intervención en su primer acercamiento que le cause dolor y le cree un mal recuerdo.

Por otro lado, según los dentistas, la primera revisión debería hacerse alrededor del primer año de edad del niño. De esta manera se puede detectar cualquier tipo de problema que si se trata en esta etapa evitará alteraciones posteriores. Los niños pequeños también pueden llegar a desarrollar caries lo que obviamente les va a causar molestias y dolor. Con estas revisiones tempranas se pueden evitar muchos de estos problemas.