El encauzamiento de los ríos de Alcoy: un compromiso olvidado
Mirando en perspectiva 5. Artículo de opinión de Alfonso Jordá, miembro del Foro SCdA-SCV
Alcoy es una ciudad situada entre montañas y ríos. Esta circunstancia ha sido un factor importante en su desarrollo histórico y a la vez le confiere un atractivo especial, tanto en su fisonomía urbana como en su entorno natural.
Pero esta ubicación no está exenta de desventajas. Como, por ejemplo, la inestabilidad de laderas característica de los cursos altos de los ríos. O bien las afecciones provocadas por las avenidas en las edificaciones industriales enclavadas durante los siglos pasados en riberas fluviales.
La última riada grave ocurrida en Alcoy data de octubre de 1986. Se aplicó el refrán de “A grandes males, grandes remedios” y las administraciones se pusieron a trabajar durante unos años coordinada y eficientemente. La autonomía acometió varias obras puntuales de emergencia. Entre las llevadas a cabo en el cauce del Barxell, destacan: la ladera de la esquina c/Obispe Orberà con Sta. Lucia o la ladera del extremo de la calle Joan Valls. En el Molinar, la Generalitat también construyó un muro y una solera localizados aguas arriba del Viaducto de Canalejas.
Más tarde, vendría la primera de las grandes actuaciones proyectadas por la administración central, el encauzamiento del Barxell entre el puente de Cervantes y el de Valencia, que se inauguró en 2006. Pero, hecho esto, los sucesivos gobiernos de todos los niveles de la administración han olvidado los demás compromisos anteriormente contraídos con los alcoyanos a raíz de dicha riada. Como consecuencia, hoy por hoy, los ríos alcoyanos son la imagen de la decadencia y el abandono. Para darse cuenta de esta realidad basta con cruzar el Viaducto y mirar hacia el cauce del Molinar aguas abajo o darse un paseo por la partida Rambla Baja o recorrer el sendero desde Cervantes hasta la Font del Quinzet.
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Estas fotos son dos meros ejemplos, la 1 el Molinar visto desde el Viaducto. Las otras corresponden al Molí d’Albors, la 2 una vista general. La 3 desde el cauce del río, y la 4 desde la carretera Algezares a Pueblo Nuevo de San Rafael, en las dos se puede observar que hay serio riesgo de desprendimiento, que se llevará parte de la carretera cuando ocurra. Como medidas preventivas se han puesto sacos de plástico con piedras para evitar que los vehículos pisen la grieta formada y un sobreancho con machaca fina en el lado contrario al precipicio para que los coches no se arrimen mucho al borde, ¡¡lamentable!!.
Sin embargo, esta situación de los ríos no es ni inevitable ni irreversible, sino una consecuencia de la desidia prolongada en el tiempo y convertida en costumbre. En efecto, solo son necesarios un poco de trabajo y de entusiasmo por mejorar nuestra ciudad y su entorno natural para revertirla. Muchos de los que aquí vivimos aspiramos a lograr un modelo de Ciudad de dimensión humana, que ofrezca a sus habitantes una gran calidad de vida.
Retomando las actuaciones de los entes públicos, a raíz de las inundaciones de 1986, la administración estatal emitió en junio de 1990 un exhaustivo documento técnico sobre las riberas de los ríos de Alcoy, denominado “Estudios hidráulicos e hidrológicos para la redacción de un plan de estabilización de laderas y defensas contra las avenidas en Alcoi (Alicante)”. Este estudio fue redactado por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), organismo que se coordinó con el Instituto Geológico y Minero de España (IGME), que a su vez preparó otro estudio con el mismo ámbito, pero relativo a la geología y geotecnia.
Fruto de los mismos, se plantearon una serie de actuaciones, en toda la zona urbana de Alcoy, relativas a la defensa contra avenidas y estabilización de laderas:
- En el Río Barxell, la intervención del tramo desde unos 400 m. aguas arriba del Puente Fernando Reig hasta su unión con el Molinar.
- En el Río Molinar, desde la zona conocida como “Les Solsides”, a las espaldas del parque de Cantagallet, hasta la confluencia con el Barxell.
- Otro tramo, ya en el Río Serpis, hasta unos 350 m. aguas abajo de la confluencia.
- También se preveían intervenciones en los barrancos de Soler y del Sinc.
Como 1ª fase de este conjunto de actuaciones, se firmó un convenio entre las tres administraciones implicadas para acometer las más urgentes en los principales ríos. La distribución de papeles acordada fue:
- La administración estatal, por medio de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), se encargaba de promover la actuación en el Barxell entre los puentes de Cervantes y de Cadisenyo.
- La Generalitat colaboraba económicamente en la obra anterior con una cantidad fija que suponía en torno al 10 % de su presupuesto inicial. Y lo más importante, a continuación se encargaría del proyecto y de la obra de todo el tramo del Molinar.
- El Ayuntamiento sólo tenía que poner a disposición de los otros organismos los terrenos, solares y naves de necesarios para cada actuación, o sea, gestionar y pagar las expropiaciones. También había de responsabilizarse del mantenimiento de todas las obras que se ejecutasen.
En eso consistía la primera fase. En una segunda, se pretendía acometer el resto de actuaciones (el Barxell de Cervantes hacia arriba, el tramo del Serpis, y los barrancos Soler y Sinc).
De todo este acuerdo de principios de los noventa, tres decenios después, se ha llevado a cabo lo siguiente:
- La CHJ básicamente cumplió con sus compromisos. El encauzamiento del Barxell es una realidad entre el puente de Cervantes y el puente de Valencia. La inauguración tuvo lugar en el 2006. Se vio obligada a reducir el ámbito de actuación en 235 m. por una serie de condicionantes técnicos perfectamente justificados. Para este subtramo recortado de las obras, la Confederación Hidrográfica del Jücar (CHJ) redactó un nuevo proyecto de construcción, desde el puente de Valencia al de Cadisenyo, que quedó redactado ese mismo año 2006. De esta manera, se completaría el tramo comprometido tan pronto el Ministerio procediese a sacar la obra a concurso.
- La GVA pagó la parte convenida del tramo del Barxell y respecto a la otra actuación importante que le correspondía, la del río Molinar, que se sepa, ni está proyectada ni se la espera.
- El Ayuntamiento fue entregando las parcelas afectadas en la parte ejecutada muy poco a poco. En cuanto al mantenimiento de la misma, simplemente con un paseo por el parque fluvial, cada cual se puede formar su propia opinión.
A partir de ahí, ya no se ha avanzado más. Quizás las crisis o los cambios de color en los ayuntamientos y en el gobierno sean la causa. Y lo de siempre: unos por otros la casa sin barrer. Por ejemplo, visitando la web del Congreso de los Diputados o la del Senado, nos encontramos con que el grupo socialista planteó enmienda a los Presupuestos Generales del Estado elaborados por el gobierno del PP de los años 2016 y 2017, para que se ejecutara el tramo del Barxell proyectado, pero parado. La enmienda consistió en dotar el encauzamiento entre el puente de Valencia y del de Cadisenyo con una partida de un millón de euros, descontándolo de otra partida genérica para compensar. En cambio, durante la tramitación de los presupuestos de 2021, la situación se produjo a la inversa: el PP presentó otra enmienda similar sobre los que elaboró el gobierno de Pedro Sánchez. Me consta que durante todo este periodo en el Congreso había y sigue habiendo algún diputado de Alcoy, que defendió esta actuación con vehemencia durante su etapa previa (hasta 2011) en la oposición municipal. No obstante, una vez en el Congreso, ya se sabe lo que supone la a veces decepcionante disciplina de voto de los grandes partidos.
Mientras, las pocas industrias que quedaban en activo en la partida Rambla Baja han ido cerrando y los inmuebles deteriorándose.
Hay que señalar la importancia de completar el tramo mencionado para protegerlo de las eventuales avenidas del Barxell. De hecho, a principios de 2012 se produjo un desprendimiento por fuertes lluvias en este tramo justo aguas abajo de la incorporación del barranco del Sinc. Como consecuencia, el ayuntamiento tuvo cortada la calle Calderón casi cuatro años hasta que realizó un nuevo muro de protección. Sin embargo, lo coherente hubiera sido exigirle al Ministerio que terminara el tramo de encauzamiento, así se arreglaban de una vez esta y otras incidencias que se puedan producir a futuro en este tramo de río. Además, su realización comportaría otras ventajas nada desdeñables como:
- La visita al MUBOMA sería mucho más atractiva con el encauzamiento ejecutado.
- Sobre todo, este proyecto mejoraría notablemente las comunicaciones a la partida Rambla Baja a la que sólo pueden acceder vehículos pequeños. Y ello, a su vez, permitiría abordar propuestas de rehabilitación de estas fábricas para su uso productivo que aportarían belleza al paisaje. Algunos elementos destacados del patrimonio industrial de la zona son: la máquina de Cadisenyo, que contiene un molino papelero tradicional que aún se podría recuperar; la fábrica de L’Escaló, el Molí d’Albors y el Acueducto de l’Arca (puente del siglo XVIII).
![[Img #61776]](https://pagina66.com/upload/images/03_2023/5183_23_03_07_plano-encauz_val_cadis.jpg)
En cuanto al resto de las actuaciones de la 1ª fase, comprometidas en el convenio firmado en la década de los noventa, es decir, la adecuación del río Molinar, se reitera que la Generalitat no ha hecho proyecto alguno. Si no se actúa, en pocos años más, la única opción será demolerlo todo.
Respecto al resto de tramos de ríos a acondicionar en la 2ª fase, contemplados en el estudio de junio de 1990, no se han tratado, dado que no se han terminado las de la primera.
El que los habitantes y sobre todo el consistorio, olviden este tipo de compromisos ocurre aquí. Pero en zonas como la Vega Baja del Segura, la Ribera del Xúquer, o la propia Alicante capital con el temporal de 1982, los ayuntamientos son los primeros en no cejar en sus reivindicaciones para que se completen en su totalidad los compromisos con sus votantes.
Tanto el tramo del Molinar que linda con el casco urbano, como la partida Rambla Baja están calificados por el PGOU vigente de 1989 como “borde urbano no urbanizable”. Además, esta última partida está en su mayor parte dentro del área del Paisaje Protegido del Serpis (Decreto 39/2007, de 13 de abril, del Consell). Este decreto en su artículo 3 (Régimen de protección) aboga por potenciarlo según se propone en este artículo. Lo que de ninguna manera admite es dejarlo como está para que se siga deteriorando.
Para terminar, ahora que se acercan las próximas elecciones municipales, habría que preguntar a los candidatos de los diferentes partidos aspirantes a la alcaldía de Alcoy qué piensan sobre las cuestiones expuestas en el presente artículo.





















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