Perspectivas inéditas en los vuelos de Alzamora. (con vídeo y galería de fotos)
[caption id="attachment_28343" align="alignleft" width="300" caption="Alcoy visto desde el aire."]
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El Centro Comercial Alzamora ha sorteado entre sus clientes vuelos en helicóptero sobre la ciudad con la campaña “Moda de altura”. En total, 50 personas han tenido la oportunidad de ver de otra manera nuestro entorno. Los responsables de Alzamora han pensado que sería buena idea que todos pudieseis disfrutar de las imágenes de la ciudad que se descubren desde el cielo y en pagina66.com no lo hemos pensado dos veces. Toda una experiencia que ahora os contamos.
Pocas veces hemos visto un grupo tan numeroso y tan silencioso. Había nervios, que por mucho que todos intentemos hacernos los modernos, uno no sube el un helicóptero todos los días. También había ilusión y, sobre todo, expectación. Las instrucciones del piloto en materia de seguridad se han seguido con máxima atención a la vez, eso sí, que los asistentes revisaban las fotos de la aeronave.
El gerente del Centro Comercial Alzamora, Paco Bustos, nos ha explicado que "hemos repetido la iniciativa a petición de nuestros clientes y la gente sale encantada". Esta ha sido la segunda edición de esta iniciativa que ya ha avanzado que podrían repetir el próximo año "porque es una pasada".
Una vez dentro nada más ha habido ojos para el paisaje. Un helicóptero viene a ser como un microbús que conduce desde el lado izquierdo un señor con traje azul delante de un montón de relojes, el piloto ha sido Rafael Sánchez. Tras el despegue, camino directo hacia el Preventorio y vuelta a la Creu. Después, destino norte, rodeo al Centro y, subiendo más hacia el cielo, hasta la Font Roja, pasa saltar a Ibi i volver por Sant Antoni.
Una vez abajo, los ganadores de los viajes han explicado que les ha encantado. Uno de ellos ha comentado que "no me bajaría nunca, ojalá me tocara otra vez", su nieto decía que "ha sido una experiencia inolvidable". También ha habido quien lo ha pasado un poco más pero al ver la felicidad de los más pequeños ha recompensado el sufrimiento. Este viaje también ha servido para descubrir cosas "no sabía que los nuevos edificios de Alcoy tuviesen piscina" ha explicado una pasajera.
Imaginad que los miradores hacia Alcoy desde el Preventorio o la Font Roja se movieran. Eso es justo lo que hemos podido ver en los vuelos de helicóptero que el Centro Comercial Alzamora ha organizado para este sábado.
Desde el aire hemos podido descubrir perspectivas nuevas desde ángulos completamente inéditos. Hemos podido fijarnos de manera especial en los edificios más significativos, las calles, los nuevos barrios y cómo avanzan las obras en los túneles de la autovía.
Además, el entorno. Si girar casi 180 grados al Preventorio, al Barranc del Sint es impresionante, no hay expresión para describir el vuelo sobre la Font Roja y su santuario antes de saltar a Ibi.
Una vez en tierra nos damos cuenta que hemos visto un estupendo escenario, pero que apenas se distingue desde el cielo a las personas. Más allá de la arquitectura o el paisaje, un vuelo así, para el recién llegado, sirve para reflexionar sobre lo pequeños que somos y lo grande que es todo. Por unos minutos pasas por encima del sitio en el que viven 60.000 personas, el centro de tu mundo diario y, sin embargo, no ves más que algún punto. No somos nadie, ni siquera hormiguitas.
Vemos el vídeo y las fotos del vuelo.
El vídeo
Las fotos
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El Centro Comercial Alzamora ha sorteado entre sus clientes vuelos en helicóptero sobre la ciudad con la campaña “Moda de altura”. En total, 50 personas han tenido la oportunidad de ver de otra manera nuestro entorno. Los responsables de Alzamora han pensado que sería buena idea que todos pudieseis disfrutar de las imágenes de la ciudad que se descubren desde el cielo y en pagina66.com no lo hemos pensado dos veces. Toda una experiencia que ahora os contamos.
Pocas veces hemos visto un grupo tan numeroso y tan silencioso. Había nervios, que por mucho que todos intentemos hacernos los modernos, uno no sube el un helicóptero todos los días. También había ilusión y, sobre todo, expectación. Las instrucciones del piloto en materia de seguridad se han seguido con máxima atención a la vez, eso sí, que los asistentes revisaban las fotos de la aeronave.
El gerente del Centro Comercial Alzamora, Paco Bustos, nos ha explicado que "hemos repetido la iniciativa a petición de nuestros clientes y la gente sale encantada". Esta ha sido la segunda edición de esta iniciativa que ya ha avanzado que podrían repetir el próximo año "porque es una pasada".
Una vez dentro nada más ha habido ojos para el paisaje. Un helicóptero viene a ser como un microbús que conduce desde el lado izquierdo un señor con traje azul delante de un montón de relojes, el piloto ha sido Rafael Sánchez. Tras el despegue, camino directo hacia el Preventorio y vuelta a la Creu. Después, destino norte, rodeo al Centro y, subiendo más hacia el cielo, hasta la Font Roja, pasa saltar a Ibi i volver por Sant Antoni.
Una vez abajo, los ganadores de los viajes han explicado que les ha encantado. Uno de ellos ha comentado que "no me bajaría nunca, ojalá me tocara otra vez", su nieto decía que "ha sido una experiencia inolvidable". También ha habido quien lo ha pasado un poco más pero al ver la felicidad de los más pequeños ha recompensado el sufrimiento. Este viaje también ha servido para descubrir cosas "no sabía que los nuevos edificios de Alcoy tuviesen piscina" ha explicado una pasajera.
Imaginad que los miradores hacia Alcoy desde el Preventorio o la Font Roja se movieran. Eso es justo lo que hemos podido ver en los vuelos de helicóptero que el Centro Comercial Alzamora ha organizado para este sábado.
Desde el aire hemos podido descubrir perspectivas nuevas desde ángulos completamente inéditos. Hemos podido fijarnos de manera especial en los edificios más significativos, las calles, los nuevos barrios y cómo avanzan las obras en los túneles de la autovía.
Además, el entorno. Si girar casi 180 grados al Preventorio, al Barranc del Sint es impresionante, no hay expresión para describir el vuelo sobre la Font Roja y su santuario antes de saltar a Ibi.
Una vez en tierra nos damos cuenta que hemos visto un estupendo escenario, pero que apenas se distingue desde el cielo a las personas. Más allá de la arquitectura o el paisaje, un vuelo así, para el recién llegado, sirve para reflexionar sobre lo pequeños que somos y lo grande que es todo. Por unos minutos pasas por encima del sitio en el que viven 60.000 personas, el centro de tu mundo diario y, sin embargo, no ves más que algún punto. No somos nadie, ni siquera hormiguitas.
Vemos el vídeo y las fotos del vuelo.
El vídeo
Las fotos
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