
Si se piensa en un plato italiano, la primera imagen que suele venira la cabeza es la pizza, los espaguetis o la lasaña. Todos derivados de la pasta. Pero actualmente, los restaurantes especializados en comida italiana ofrecen alternativas a estas tradicionales comidas.
Uno de estos platos es el risotto. Esta combinación de arroz y otros ingredientes es de origen italiano, concretamente de la zona noroeste del país transalpino. Hace más de 700 años que se inventó y, cómo no, va acompañado del delicioso sabor del queso parmesano.
En PastaManía recomiendan "cocinar este plato con caldo de pollo, cebolla, vino blanco, aceite de oliva, sal, mantequilla y setas, además de la base de arroz de grano redondo".
Se ha de hervir un litro y medio de caldo y cuando esté listo en ebullición, se deja al mínimo.
En una cazuela se echan dos cucharada de mantequilla junto a la cebolla troceada en capas muy finas y un poco de aceite de oliva, esencial en la dieta mediterránea. 8 minutos a fuego lento junto a la mitad de las setas serán más que suficientes.
En el momento en el que la cebolla esté pochada se añade el arroz y se sube el fuego durante dos minutos. El medio vaso de vino blanco que se echa después le dará un toque muy delicioso a nuestro resultado final. Luego se añade el caldo preparado anteriormente para que el arroz lo absorba.
Hay que remover el plato junto al parmesano para dar con el plato que se busca: un excelente risotto preparado por uno mismo.
En PastaManía recomiendan esta receta, "pero si no se tiene tiempo o no se es muy habilidoso en la cocina", estarán encantados de ofrecer a sus clientes su variedad de risottos. Uno de los ejemplos que casan a la perfección durante esta época es el risotto de foie, setas y trufa.