La noticia sobre los 800.000 euros de indemnización que debe pagar a Alcoy a uno de sus vecinos, tras la demolición de un edificio como parte de un plan urbanístico aprobado por el Partido Popular que era contrario a la ley, ha generado más confrontación de la que ya existía entre el Gobierno Municipal y el PP.

En el comunicado del Gobierno Municipal sobre la condena recibida, la conjecala de Urbanismo, Lorena Zamorano, recriminaba al PP que el Ayuntamiento de Alcoy se tenía que hacer cargo de las deudas generadas durante sus años en el gobierno. "Resulta muy difícil planificar cuando 14 años después las actuaciones de los populares continúan costando a los alcoyanos centenares de miles de euros" declaró Zamorano defendiéndose así de las críticas que Quique Ruiz, portavoz del PP, había lanzado contra la planificación presupuestaria del PSOE.

Ahora es Ruiz quien ha salido para defender a su partido y a su propia persona. “Una concejal que está imputada por un delito penal de malversación de caudales públicos no es la más indicada para hablar de mala gestión o de sentencias judiciales”, ha atacado Ruiz. Además el portavoz popular ha ha pedido públicamente a Lorena Zamorano “que no utilice mi nombre, al menos mientras permanezca imputada por un presunto delito de malversación de fondos públicos”.