Al finalizar el partido entre Alcoyano y el Badalona con victoria para los blanquiazules, el técnico Óscar Cano ha explicado que los cambios en el once "no han sido ningún cástigo para los jugadores que se han quedado en el banquillo o en la grada, si no que ha sido por el rival. Creíamos que eran los futbolistas más adecuados para enfrentarse al Badalona".

Ha dado nombres propios, "yo me iría al fin del mundo con Javi Rubio y Joan Vich ha marcado el gol más importante del año, Bello es muy importante y Francis Ferrón un luchador pero creíamos que era mejor tener a Devesa, Carles, Julio, Jorge Perona y Alfaro. A Isra si sigue así va a ser muy difícil será muy difícil sacarle del once, en el tramo final del partido ha dado varios sprints tremendos. Su entrega es total".

Así respecto el resultado final ha explicado que "me parece poco con los méritos que hemos realizado. Los primeros 40 minutos han sido muy buenos y al menos hemos podido marcar un gol. Luego es cierto que en la segunda mitad se ha visto un mal partido. Ellos no nos han inquietado pero nosotros hemos tenido miedo. La situación del equipo es muy peligrosa y los jugadores lo notan, quieren salir de ahí abajo y tienen ansiedad, angustia, estrés, etc y eso se ha notado al final pero hemos sumado los tres puntos".

Por último, respecto al futuro y a nivel personal, el técnico ha afirmado estar tranquilo, "yo afortunadamente me puedo dedicar a otras tareas para ganarme la vida. Si las cosas salen bien perfecto y si no me voy a casa. Los banquillos son como sillas eléctricas y cuando fichas por un equipo es un día menos que te queda para que te echen. En España no hay proyectos, solo resultados que dependen de la suerte. Me gusta tomar mis propias decisiones. Anoche estuve hasta las doce de la noche viendo fútbol y trato de decidir lo más idóneo. Sé claramente quienes son indios y quienes pistoleros y de donde me vienen las flechas".

El jugador que ha comparecido ante los medios ha sido Carles Salvador, uno de los más destacados, y ha reconocido que "en la segunda parte hemos estado muy imprecisos con el balón, pero todo el partido hemos trabajado bien sin él. El Badalona casi no ha tirado entre los tres palos. El gol nos ha liberado pero no hemos podido sentenciar. Nos hemos dedicado más a jugar con el marcador a favor. Debemos ir sumando de tres en tres. Esperemos que este partido sea un punto de inflexión. Lo necesitábamos. Si ganamos tres partidos estamos arriba, si perdemos nos vamos abajo, es Segunda B". A nivel personal se ha encontrado muy cómodo en su posición natural de mediocentro defensivo.